"Es central estudiar los conflictos alrededor de quién decide cómo y cuánta agua se consume en lugares como la Meseta"

“Siempre es un gusto volver a Argentina, donde nací y viví 27 años. Salí por cuestiones políticas, en 1978, durante el gobierno militar de entonces. La relación con el ambiente académico me ayuda mucho a no vivir en el pasado, pero en cambio atesorar la memoria. Son cosas diferentes.”, relata el Dr. Gerardo Bocco, geógrafo por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y doctor en Geografía por la Universidad de Ámsterdam.

Desde 1995, Bocco es investigador titular en la UNAM (campus Morelia), donde dirigió el proceso de creación del Centro de Investigaciones en Geografía Ambiental (CIGA), y fue su primer director (2007-2015). Es investigador correspondiente (ad-honorem) en el IPCSH (CONICET-Madryn). Se interesa en el manejo de recursos y gestión del riesgo ambiental en pequeñas comunidades rurales.

Recientemente visitó la Ciudad de Puerto Madryn a instancias de trabajar en la tesis de una becaria del IPCSH, la cual dirige; también para discutir e interactuar con los proyectos del IPCSH, su grupo sociohistórico y el eje socioambiental y territorial; y de brindar la conferencia “De los nombres de lugares a los lugares sin nombre”.

¿Qué sensaciones le dejó la visita por nuestras tierras y a nuestro Instituto?

"Me dio mucho gusto reunirme con los colegas del IPCSH, y tomar contacto con el trabajo en la cartografía de lugares y lenguas, les agradezco mucho el tiempo que me dedicaron para explicarme lo que hacen, pese a la adversidad del momento que estamos viviendo. Conocía el trabajo de algunos, y en especial, habíamos colaborado con Julio Vezub, Ana Cinti, y Matías Chávez en un estudio sobre los pulperos y el camino que usaban en su actividad de recolección. Fue una oportunidad excelente para trabajar de manera interdisciplinaria con el CESIMAR, que es donde trabaja Ana Cinti. Por otra parte, me impresionó mucho el nuevo gobierno. Habrá que ver cuánto dura el sueño y la esperanza de los que lo votaron".

En la jornada de su conferencia, Bocco estuvo acompañado por su colega el Dr. Pedro Urquijo, también de la UNAM, quien desarrolló una charla titulada “Mapas de tradición indígena en la época colonial: Fuentes para la geografía histórica y la historia ambiental”.

¿Qué opinión le merecen las preguntas que les realizaron a Ud. y al Dr. Urquijo durante las conferencias que brindaron en el CENPAT?

"Fueron preguntas importantes. Me obligaron a pensar con cuidado las ideas que intenté expresar en la ponencia. Una pregunta se dirigió a cuestionar la necesidad de alcanzar conceptos de valor universal, y de esa manera perder de vista la cuestión particular encerrada en las culturas diversas que ocupan un territorio.

Otra sugirió que era difícil poder manejar tantas variables en el intento de tipificar porciones del terreno de una comunidad agrícola, dadas las cuestiones culturales y de uso de la lengua en diferentes culturas.

Una más hizo referencia al trabajo en comunidades mapuches y tehuelches, y comparó sus avances con los avances de mi propia investigación. Lo cual sugiere la posibilidad de establecer vínculos de cooperación académica a largo plazo".

Estuvo trabajando con una becaria del IPCSH, Nazarena Funes, de quien dirige su tesis de doctorado. ¿Qué avances pudieron hacer en virtud del encuentro director-tesista?

"El trabajo de Nazarena se enfoca en un tema clave, el agua, en particular en su gestión, y las complejidades que esto encierra. Es decir, parte de reconocer que, si bien se dispone del recurso, incluso con cierta abundancia en comparación con lo que ocurre en otras porciones de la Meseta, el problema central se encuentra en quién decide cómo y cuánto se consume, y los conflictos en torno a esta cuestión. Fue muy importante conversar cara a cara con la tesista y la Dra. Ana Cinti del Centro para el Estudio de los Sistemas Marinos (CESIMAR-CONICET), también tutora de la tesis. Es muy importante el contacto personal, y no sólo intelectual en la dirección de una tesis. Es un desafío para ella y nosotros, pero tanto por su dedicación como por el apoyo de su comité de doctorado, esperamos que los resultados sean a la vez sólidos y útiles para la comunidad local de Telsen que le ha brindado la oportunidad de estudiar en forma conjunta el tema".

¿Qué se lleva del intercambio académico con los y las colegas del IPCSH?

"En síntesis, la visita a Madryn y al Instituto, siempre es un gusto, aunque esta vez estuve a media máquina por una gripe muy fuerte. De todos modos, pudimos fortalecer vínculos, visualizar temas comunes, en especial el uso de lenguas locales en la denominación de espacios y lugares, y el proyecto manejo del agua a nivel doctoral, lo cual es un compromiso muy fuerte, pero muy agradable".